La música en los Tartesos

Introducción

Su cultura floreció en el oeste de Andalucía y el sur de Portugal entre los siglos XII y VI a.C, aproximadamente, llegando a extender su influencia por gran parte de lo que hoy es la región andaluza.

La postura mayormente aceptada es que esta cultura nació del contacto entre las poblaciones indígenas y los colonizadores fenicios en el Suroeste de la península Ibérica.

Estaban organizados en una monarquía con sede en una capital que gobernaba todo el territorio. El último de sus reyes, y el único del que se tienen referencias históricas, fue Argantonio, cuyo nombre significa algo así como “El de la plata”.

Santuario tartésico de Cancho Roano en Badajoz -(Reconstrucción)
Imagen: almendron.com

Los tartesios, que conocieron la escritura, desarrollaron una civilización floreciente basada en sus recursos agrícolas, ganaderos, pesqueros y, especialmente, en la minería (oro, plata, estaño y bronce).

Establecieron relaciones comerciales con los pueblos del Mediterráneo, convirtiéndose en los principales proveedores de bronce y plata en el Mare Nostrum hasta su "repentina" desaparición.

La ciudad perdida. ¿Tartessos o La Atlántida?
Imagen: cinconoticias.com

Sobre la desaparición de Tartessos existen múltiples hipótesis: tsunamis documentados en la zona, invasiones celtas, invasión por los cartagineses, agotamiento de recursos minerales, problemas comerciales, terremotos, sucesión de catástrofes naturales, evolución de la cultura del bronce a la del hierro, etc. Pero lo cierto es que no se tienen datos concretos sobre su extinción.

Por otro lado, después de muchos años de investigación, no se ha descubierto la ciudad de Tartessos. Y, por si todo ello fuera poco, varios historiadores y arqueólogos han asociado Tartessos con la mítica ciudad de La Atlántida.

Todo ello ha provocado que la historia de Tartessos esté profundamente inmersa en lo enigmático, la mitología y la leyenda.

Parque nacional de Doñana
Imagen: wastemagazine.es

La música en la antigua civilización de Tartesos

Es muy difícil saber como sería la música de los tartesios pues los restos arqueológicos musicales que han llegado hasta nuestros días son muy escasos y, a veces, confusos. Pero sí que podemos hacernos una idea aproximada de como eran sus instrumentos.

Respecto a los instrumentos de cuerda, la arqueología nos ha revelado varios tipos que podrían haber sido utilizados por esta civilización y, en todo caso, en la zona suroccidental de Andalucía durante esta misma época.

Estela de Higuera la Real. Texto tartésico
Imagen: es.wikipedia.org

Entre ellos se encontrarían diferentes tipos de liras. Algunas, probablemente, anteriores a la llegada definitiva de fenicios y griegos. Otras claramente influenciadas por estas culturas.

Estela tartesia. Zarza Capilla, Badajoz
Imagen: es.m.wikipedia.org

También existen representaciones de instrumentos de cuerda sin mástil que se tañían con los dedos o con la ayuda de un plectro o púa.

Es indudable que tras la llegada de fenicios y griegos a la Península se asumieron muchas de sus costumbres, incluyendo, por supuesto, las musicales. Esto implicaría la utilización de instrumentos musicales de todo tipo (cuerda, viento y percusión). También está confirmada la existencia cánticos desde el Bronce Final.

En definitiva, los restos arqueológicos de las antiguas Andalucía y Extremadura dan pie a pensar en una practica musical autóctona en la zona del sudoeste peninsular desde muy antiguo que, posteriormente, se vio influenciada por los pueblos colonizadores.